Dos bonitas lesbianas se jodan con un consolador largo

Su amorosa novia llega a la muñeca rusa después de largos años de separación. Ella la hace una sorpresa en forma de un consolador largo y flexible y pide que lo pruebe juntos. Habiendo lamido bien en ambos lados, las migajas se hacen sensuales. Después de haber disfrutado muchas caricias orales, una lesbiana caliente inserta un extremo del consolador en la vagina de la pareja, y el segundo se inserta lentamente en su coño. Moviendo vigorosamente la cuenca, ofrece sensaciones inolvidables tanto para ella como para su amada novia.